Diego Giustozzi, seleccionador de Vietnam, analiza la Copa de Asia y las posibilidades del combinado vietnamita
- A poco más de un mes para el inicio de la Copa de Asia de fútbol sala, ¿cómo la afronta el seleccionador de Vietnam?
Con ganas, con los típicos nervios de afrontar una clasificación que es más difícil que el Mundial mismo. Teníamos un plan desde hace dos años y estábamos en el mejor momento pero las lesiones no nos ayudaron y perder cuatro jugadores a semanas de la competencia nos trastoca mucho los planes, pero para esto estamos aquí y hay que encontrar soluciones rápido.
- Tu primera competición y la octava participación vietnamita. ¿Cuál crees que puede ser la clave en un torneo tan corto?
Para clasificar al mundial tenemos que jugar 6 partidos en 10 días, así que la parte física y el equilibrio mental y táctico durante muchos partidos serán clave para alcanzar el objetivo.
- Encuadrados con Tailandia, Myanmar, China, ¿cuál es vuestro objetivo?
No queda otra que, si queremos clasificar al Mundial, tenemos que entrar entre los dos primeros, así que no hay mucho para darle vuelta en este tema.
- El cuarto puesto de 2016 es la mejor clasificación histórica del país, ¿crees que podréis igualar ese resultado?
Clasificar a semifinales es el mejor escenario posible, pero hicimos todo lo posible para lograrlo, así que esa ilusión nadie nos la sacará.
- ¿Qué ha aportado Diego Giustozzi al combinado nacional de Vietnam?
Traté de entender su idiosincrasia, de vivir su realidad y, a partir de ahí, trabajar para sacar el 100% de ellos como jugadores individuales y como equipo.