Ampliar nuestras fronteras ha sido clave en el crecimiento de la empresa
El país nipón se ha convertido en territorio fundamental dentro de nuestra estructura de negocio. Con el paso de los años, Proneo Sports ha logrado ampliar nuestras fronteras y aterrizar en puntos muy lejanos. Aun así, el camino no ha sido nada fácil. Todo empezó en 2007, un año después del nacimiento de la empresa. Cuando se fundó la F-League, la primera competición oficial de fútbol sala en Japón, cogimos la mochila y decidimos ir a descubrir y a explotar nuestro deporte en un país muy desconocido.
En nuestro primer movimiento internacional, llegamos a Japón con la ambición y la ilusión de seguir aprendiendo para saber aprovechar nuestro momento. De la mano de nuestro gran amigo Sito Rivera, conseguimos ir entrando, con paso firme, en un deporte que empezaba a crecer en territorio asiático. Viajamos y viajamos para poder ampliar nuestra cartera de contactos y poder empezar a trabajar en una zona por explotar. A lo largo del tiempo, empezamos a organizar eventos y tecnificaciones para jugadores japoneses en España con el objetivo de crear sinergias entre empresas y poder mejorar nuestro valor de marca. Una de las figuras clave en este proceso de crecimiento exponencial fue el de Kenji Zama, nuestra mano derecha. Después de un primer periodo navegando sin timón, Kenji, a través de su gran conocimiento de fútbol sala y del país nipón, fue clave en la ampliación de nuestras posibilidades de integración.
Llegó el 2016 y llegó el fútbol. Después de una etapa de trabajo oscuro, pudimos entrar en el mundo del fútbol. Y lo hicimos a lo grande. Miguel Ángel Lotina, técnico muy reconocido en Europa, aterrizó en Japón de la mano de Proneo Sports para empezar una andadura que ha alargado más de siete años. En la actualidad, 16 años después de llegar por primera vez a Japón y después de una pandemia mundial que afectó a nuestros vínculos, representamos a un total de once deportistas entre las dos disciplinas. Han sido años de trabajo, dónde hemos disfrutado de relación con clubs de Tokio, Osaka, Nagoya o Sendai y de la competición de primer nivel asiático. Además, Japón ha jugado un papel determinante en nuestra evolución en todo el territorio asiático.

