Kimberley fue de menor a mayor en este torneo Transición. Quizás por el ensamble que necesitó un plantel renovado de aquel que peleó por la permanencia en 2019, más allá que muchos de sus jugadores son viejos conocidos.
Pero desde octavos de final encontró un mejor funcionamiento, el DT Nicolás «Dibu» Diéguez pudo usar a todos sus jugadores y no desaprovechó las pocas chances que le dio este domingo Villa La Ñata en una de las semifinales, para quedarse con el boleto a la definición por el título, el próximo viernes ante Boca.
El «Celeste» de Villa Devoto por momentos tuvo que padecer la espectacular técnica individual del «Naranja» e incluso su juego de 5vs4, que usó como estrategia en todo el torneo adelantando a Ezequiel «Rengo» González.
En esos momentos de zozobra se apoyó en Lucas Farach, que volvió a tener una sobria actuación, apuntalada también por el oportunismo de Martín Persec.
La Ñata se fue 1-0 al descanso por una definición de Germán Brizuela -que robó en zona alta- y el yerro de Santi Basile en un doble penal, a falta de un segundo para el entretiempo.
En el complemento, Diéguez mandó a la cancha a Persec, que tuvo una molestia en el tobillo durante toda la semana y estuvo entre algodones, pero el pivot le devolvió la confianza con un doblete -el segundo a 43 segundos del final- y una participación clave en el segundo tanto, obra de «Pulga» Geraghty.
En el medio, había descontado Jony Carnevale, con Eze González como arquero jugador, que justamente erró la última ocasión con nada de tiempo en el reloj, que podría haber llevado al alargue la definición.
Kimberley, bicampeón 2015 y 2016, vuelve a una definición por el título luego de dos temporadas, luego de 2017 donde justamente lo venció Boca, su rival del viernes, por penales en el tercer partido de la serie.
Fuente: pasionfutsal.com.ar